La piel no es solo lo que percibimos a simple vista. Además de ser el órgano más grande del cuerpo, es la primera y la principal barrera de protección frente a organismos internos y externos. Por este motivo es fundamental entender su funcionamiento, comprender cuáles son sus necesidades y aprender a cubrirlas, y para ello las cremas regeneradoras juegan un papel fundamental.
Cremas regeneradoras: ¿qué son?
Las cremas regeneradoras, también conocidas como cremas reparadoras, son aquellas que le aportan a la piel todos los nutrientes lípidos que necesita para volver a su estado natural y poder funcionar correctamente.
Normalmente, las cremas regeneradoras poseen propiedades antioxidantes, despigmentantes y estimulantes para la producción de colágeno que penetran rápidamente en las capas más profundas de la piel, devolviéndole la elasticidad y confort que ha perdido con el paso de los años.
Entonces, ¿para qué se utilizan este tipo de cremas? Su objetivo es devolver a la piel su estado de salud natural, ayudarla a cumplir su función de barrera protectora, proporcionarle un aspecto joven y eliminar o reducir la aparición de manchas e impurezas. Es decir, cumplen una función vital para que la piel no pierda su tersura y luminosidad.
Y, en cuanto a la edad a la que se debe iniciar su uso, es importante tener en cuenta que los 20 años son la época de máximo esplendor para la piel. A partir de ahí empieza a perder propiedades y a mostrar los primeros signos de envejecimiento y los efectos nocivos de los radicales libres. Por eso, se dice que la necesidad de su uso depende mucho de la herencia (los factores genéticos) y de tener un buen historial en los cuidados de la piel.
En cualquier caso, las cremas regeneradoras son un buen aliado si hablamos de paliar los efectos del tiempo y prevenir el envejecimiento prematuro.
¿Cuál es la mejor crema para regenerar la piel?
Disminuir los efectos del paso del tiempo es uno de los objetivos de esta clase de productos, pero también es vital el cuidado, protección y regeneración de las pieles dañadas, así que la mejor crema regeneradora será aquella que resuelva ambos problemas, como es el caso de Bioxán.
Nuestro objetivo siempre ha sido ayudar que las pieles frágiles, dañadas o reactivas recuperen su salud y bienestar natural, por eso la línea de cremas regeneradoras Bioxán está orientada a combatir no solo el envejecimiento, sino el deterioro de la piel, y todo gracias a la combinación de sus principales propiedades (antioxidante, hidratante, antiedad y anticontaminación) y a los componentes de origen natural.
Cremas regeneradoras de origen natural
Para recuperar el estado de bienestar natural de la piel es indispensable que pueda cumplir su función defensiva y protectora, por eso los productos Bioxán son ricos en a-Oligosacáridos, un prebiótico considerado una fuente de defensa natural. La función principal de este ingrediente activo es el efecto regenerador intensivo inmediato que tiene sobre la piel.
Los prebióticos, además de la función de protección de la barrera cutánea, tienen otras propiedades tales como ayudar a reforzar la regeneración de la piel y disminuir los signos de la edad, funcionar como un potente activo en el tratamiento contra el acné y mantener la higiene general del organismo.
La ventaja de utilizar cremas regeneradoras fabricadas con ingredientes naturales es que estos compuestos tienen una similitud orgánica con nuestras células, lo que ayuda a que la piel los absorba mejor y tengan efectos más duraderos.
En Bioxán trabajamos exclusivamente por y para el cuidado de la piel, y somos pioneros en el desarrollo de tratamientos que alivian, mejoran y regeneran las pieles frágiles o dañadas. Contacta con nosotros si quieres más información acerca de la línea de cremas regeneradoras.